Juntas
son dinamita…
Canela
y miel son las únicas substancias alimenticias en el planeta que no se echan a
perder ni se pudren. Aunque su contenido se puede convertir en azúcares, de
todas formas la miel siempre es miel. Si la miel se deja por largos períodos de
tiempo en un lugar oscuro se cristalizará. Cuando esto pase abra la tapa y con
el calor de agua hervida, déjela derretirse. La miel estará tan buena como
cuando nueva.
Nunca
hierva la miel ni la ponga en el microondas, de esta manera se matan sus
enzimas. La canela y la miel (y esto no les gustará a las compañías de
medicamentos), pueden curar muchas enfermedades.
La
miel es producida por la mayoría de los países del mundo. La ciencia acepta a
la miel como un medio muy efectivo para tratar enfermedades. La miel puede ser
utilizada sin dar efectos secundarios y tomada en la dosis correcta, aunque sea
dulce, no afecta a los diabéticos.
Miel
y canela para nuestras vidas
La
combinación de la miel y la canela se han utilizado por siglos en la medicina
ayurvédica y en la medicina china. La canela es una de las especias más
antiguas conocidas por la humanidad. Estos dos ingredientes con capacidades
únicas ingeridos separadamente, tienen una gran historia como remedios caseros.
La combinación de las enzimas de la miel con los aceites esenciales de la
canela reacciona formando entre otras cosas peróxido de hidrógeno, un compuesto
muy utilizado en la medicina complementaria como tratamiento tanto oral como
intravenoso en numerosas patologías.
La
miel y la canela son dos productos que tienen la habilidad de detener el
crecimiento de bacterias y hongos y se utilizan como conservantes naturales
debido a sus efectivas propiedades antimicrobianas.
Algunos
estudios dan cuenta de que la ingesta de la combinación de ambas sustancias
alimenticias favorece la cura natural de muchas enfermedades y es una fórmula
que trae innumerables beneficios para la salud.
ATENCIÓN:
La canela que debe utilizarse tanto
para esta preparación como para un consumo seguro es la canela de Ceilán
(Cinnamomum zeylanicum o Cinnamomum verum) ya que la canela de China
(cinnamomun cassia o cinnamomun aromaticum) que se utiliza en productos
industriales contiene una alta concentración de cumarina, una sustancia
aromática que con el consumo a largo plazo puede ocasionar problemas hepáticos
en personas sensibles. Esta última es la más utilizada en América, mientras que
la canela de Ceilán se utiliza más en Europa y contiene hasta 1250 veces menos
cumarina que la canela china y está dentro de los límites tolerables y seguros para
esta sustancia.
A
continuación enumeramos algunos de los beneficios de esta combinación,
diferentes tipos de preparación y algunas enfermedades en las que su
utilización puede ser de gran ayuda según datos de la revista canadiense Weekly
World News de 1995:
Haga
una pasta de miel y canela, aplique todas las mañanas en pan, en vez de
mermelada y cómala regularmente como parte del desayuno. Esto reducirá el
colesterol en las arterias y prevendrá en el paciente ataques al corazón.
Además, aquellos que ya hayan pasado por un ataque al corazón, si siguen este
proceso, estarán protegidos de sufrir un siguiente ataque al corazón. El uso
regular de estas substancias ayuda a retener el aliento sano y a fortalecer el
músculo y el movimiento rítmico del corazón.
En
Estados Unidos y Canadá, varios asilos de ancianos han curado pacientes cuyas
venas han perdido flexibilidad y se han tapado. La miel y la canela las
revitalizan.
Artritis
Pacientes
con artritis pueden tomar diariamente por las mañanas y las noches una taza de
agua caliente con dos cucharadas de miel y una cucharada pequeña de canela en
polvo. Si se toma regularmente incluso la artritis crónica puede ser curada. Recientes
investigaciones por la universidad de Copenhagen demostraron que los doctores
que trataron a sus pacientes con una mezcla de una cucharada de miel y media
cucharadita de canela antes del desayuno, corroboraron que en una semana, de
200 pacientes, 73 ya no sentían dolores artríticos y al mes, casi todos los
pacientes que no podían ni caminar o moverse por los dolores, se movían sin
sentir dolores.
Digestión
La
canela esparcida en dos cucharadas de miel tomadas antes de las comidas puede
reducir la acidez y digerir hasta los alimentos más pesados.
Catarros
y resfríos
Un
científico en España ha comprobado que la miel contiene un ingrediente natural
que mata los gérmenes de la influenza y que protege a los pacientes del
catarro.
Longevidad
El
té hecho con miel y canela, tomado regularmente disminuye los daños causados
por la edad avanzada en los tejidos. Tome cuatro cucharadas de miel, una de
canela en polvo y tres tazas de agua hirviendo para hacer un té. Tome un cuarto
de taza, tres a cuatro veces al día. Mantiene a la piel fresca y disminuye los
daños causados por el envejecimiento de tejidos y radicales libres, alargando
el periodo de vitalidad regularmente a más de 100 años.
Infecciones
de la vejiga
Tome
dos cucharaditas de canela en polvo y una cucharada sopera de miel en un vaso de agua tibia y bébalo
normalmente. Destruirá los gérmenes en la vejiga
Colesterol
Dos
cucharadas de miel y tres cucharaditas de canela en polvo mezcladas con 16
onzas de te administrados a un paciente le redujeron el alto nivel de
colesterol en la sangre a un 10 por ciento en las primeras dos horas del
tratamiento. Como mencionamos anteriormente para pacientes artríticos, si
tomado tres veces al día, cualquier enfermedad de colesterol crónica es curada.
De acuerdo a la información en esta revista, la miel pura tomada como alimento
a diario ayuda a reducir el colesterol.
Resfriados
Aquellos
que sufren de severo resfrío pueden tomar una cucharada de miel tibia con 1/4 de cucharadita de canela por
espacio de tres días. Este proceso cura cualquier resfrío y aclara la sinusitis.
Estómago
Miel
tomada con canela también ayuda a curar el estómago, aclara y hasta cura
ulceras completamente.
Gases
Estudios
hechos en India y Japón revelan que la miel y la canela reducen el gas en el
sistema digestivo.
Sistema
inmunológico
El
uso diario de miel y canela en polvo fortifica al sistema inmunológico y
protege al cuerpo de bacterias y virus. Científicos han encontrado en la miel
varias vitaminas e hierro en grandes cantidades.
El
uso constante de la miel fortifica las células blancas de la sangre y protege
de enfermedades.
Espinillas
Tres
cucharadas de miel y una de canela en polvo, haciendo una pasta, se puede
aplicar a espinillas antes de dormir, lavándose al siguiente día con agua
tibia. Si se realiza por dos semanas, desaparecerá espinillas desde
la raíz.
Infecciones
de la piel
La
aplicación de miel y canela en partes iguales en las partes afectadas curan el
eczema y todo tipo de infecciones de la piel.
Pérdida
de peso
En
las mañanas, media hora antes del desayuno y antes de ir a dormir, beber una
taza de agua previamente hervida con miel y canela. Si se bebe regularmente, reduce el peso de hasta la
persona más obesa. También, el beber la mezcla regularmente no permite a las
grasas acumularse en el cuerpo aun si la persona lleva una dieta alta en
calorías.
Cáncer
Recientes
estudios en Japón y Australia han demostrado que canceres avanzados de estómago
y huesos han sido totalmente curados. Pacientes sufriendo de estos canceres
deberán tomar diariamente una cuchara de miel y una de canela por espacio de un
mes tres veces al día.
Fatiga
Estudios
han comprobado que el contenido de azúcar en la miel ayuda y no debilita la
cantidad de fuerza en el cuerpo. Personas de la tercera edad que toman miel y
canela en partes iguales, están más alertas y son más flexibles. El Dr. Milton,
que ha hecho la investigación, dice que un vaso con una cucharada de miel y
espolvoreado de canela todos los días al levantarse y a las tres de la tarde,
cuando la vitalidad del cuerpo empieza a disminuir, incrementa la vitalidad del
cuerpo en el espacio de solo una semana.
Halitosis
(mal aliento)
Personas
en Suramérica suelen hacer gárgaras con una cucharada de miel y canela en agua
caliente, conservando el aliento fresco por todo el día.
Pérdida
de la audición
A
diario, miel con canela en partes iguales ayuda a reparar tejido dañado de los
oídos. Quién no recuerda en su niñez haber comido pan tostado con mantequilla y
canela…
(Artículo publicado en el quincenario EL TALLÁN
INFORMA, Año VII - Edición Nº 80 - Sullana, primera quincena de junio del
2013)